El Perú ha sido fragmentado en 25 regiones, 196 provincias, 196 municipios provinciales y 1,874 distritales, la mayoría de estos fragmentos son incapaces de autogobernarse. Hemos logrado que el 80% de la tierra agrícola de los valles tradicionales esté fragmentada en lotes menores a 4 hectáreas y ahora hay quienes, derogando la ley contra el transfuguismo, quieren fragmentar el Congreso sin importarles que lo requerido es evitar el transfuguismo sin fragmentar el Congreso ni quitar a los peruanos el derecho de estar representados en el Congreso por congresistas que puedan expresarse libremente pero de acuerdo al mandato doctrinario que recibieron de sus electores. Si el Congreso se fragmenta requerirá muchos “dame que te doy” con los grupos políticos que el transfuguismo crearía y los “toma y daca” que se producirían entre los congresistas, convertirán al Congreso en una Parada.
El fraccionamiento universitario es también inconveniente porque, como no hay suficientes profesionales preparados para ser catedráticos, la calidad de los graduados puede no ser igual en todas las universidades y el sector estatal, por ser el Estado quien emite los títulos, aunque deteriore los servicios que tiene que brindar, incluido el de justicia, no podrá seleccionar, como lo hace el sector privado, a sus profesionales en función de la universidad en que estudiaron.
Los medios, como lo ha hecho EXPRESO, deben publicar su posición política y socio económica y hasta donde es posible, como también lo hace EXPRESO para evitar que haya temas ocultos, deben publicar la opinión de cada vez más peruanos independientes; ello, porque para evaluar un medio es más importante conocer lo que oculta que estar al tanto de lo que dice.
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